Enseñame pero bonito

El aprendizaje es muchísimo más que ir a la escuela, sentarse en una silla y escuchar la lección que nos dicta el maestro. Con este aprendizaje solo conseguimos aprender lo que nos gusta, pero no todo lo importante.

La educación que queremos conseguir para todos es una educación que se base en la curiosidad del niño y el estudio de las cosas reales,  con sentido.  Un aprendizaje en el cual los niños aprenden jugando y equivocándose, asuman ciertos roles. Un aprendizaje en el que los alumnos sean los protagonistas, por ello deben ser partícipes en todo momento.

Los maestros reflexionan sobre lo que hacen y por qué lo hacen, poniendo normas y limites a los alumnos que les ayuden a crecer. El estrés no sirve para aprender, por lo tanto no hay exámenes, la educación debe darse en un ambiente relajado y cómodo. No se mandan deberes, no tienen sentido quitan tiempo para jugar y el juego es muy necesario para adquirir muchas competencias. El maestro está atento, pero en la sombra, deja que se haga. Se les ayuda a crecer, se les acompaña en las cosas que les pasan. Crear contextos y situaciones de aprendizaje, encuentran recursos. Si algo no se sabe entre los docentes se busca alguien que lo conozca entre las familias.

Los niños tienen libertad en el aspecto activo del aprendizaje, todos aprendemos desde que nacemos, es algo activo. El aprendizaje está determinado por el deseo. Lo importante no es leer y escribir es comunicarse, y los alumnos están deseosos de comunicarse. Aprenden de manera libre y espontánea.

Las aulas son muy accesibles para los alumnos, el alumno puede usar el material que necesite sin pedir permiso. Hay varias mesas pero no una por alumno, para que trabajen juntos. Aprenden de cosas tan cotidianas como la cocina, hacen recetas y experimentan.

No hay una manera concreta de resolver los conflictos, el conflicto y las relaciones humanas son prioridad. Aprendemos hasta donde nos podemos expresar, cuando hay otras personas expresándose. En un principio debemos dejar que intenten arreglarlo ellos mismos. Que los alumnos reflexionen sobre su comportamiento. Si de pequeño han encontrado herramientas, de mayor van a saber actuar. En este tipo de escuelas aprenden habilidades sociales muy importantes para la vida, que sirven para que sepan adaptarse ante las dificultades.

 La familia es el ecosistema más esencial para el desarrollo total del alumno. La comunicación entre maestros y padres es muy importante para que la educación fluya, se implican en las reuniones conjuntas. Las familias que se acercan al proyecto buscan una educación conjunta entre padres y docentes.

El gran problema es el desconocimiento. La zona de confort es difícil de romper esto es una gran barrera. El que las cosas no estén claras, la libertad da mucho miedo.  Miedos comprensibles pero con poco sentido. La solución es que se vea el aprendizaje en todos los lados y se visiten escuelas.

Este nuevo proyecto debe ser accesible para todo el mundo,  lo económico no debería ser una barrera. Se llega a acuerdos con las familias para que nadie se quede fuera.

En conclusión, se trata de una educación  en la que participan familias, docentes y alumnos. Los alumnos son los protagonistas de su aprendizaje.